Afortunadamente, Roberto Verino ha traído a la pasarela Cibeles esa pizca de irreverencia y diversión que necesitábamos desesperadamente. La moda significa tener poco sentido de la vergüenza y mucho sentido del humor. Jugar a vestirse y travestirse, disfrazarse y convertirse en otra persona que vive en otra década, en otra ciudad y en otro momento.
Verino se fija concretamente en atuendos propios de los 70´s con guiños trashy discotequeros: pantalones airy en pata de elefante, divertidos borsalinos y chisteras con largas aplicaciones de pluma de avestruz, resplandecientes paillettes y suntuosos detalles de pelo de zorro, todo ello aderezado con un sofisticado toque vintage.
Verino se fija concretamente en atuendos propios de los 70´s con guiños trashy discotequeros.
Ciertamente, el tema no es “hoy” –donde los pitillo slim todavía nos persiguen- sino más bien un apetecible “mañana” con prendas mucho más holgadas, juveniles, desenfadadas y algo hippy. Los estampados deliciosamente demodé en pata de gallo y Príncipe de Gales se suceden en abrigos cocoon inflados de volúmenes, abrigados y acolchados.
Destacamos los calentadores de punto grosso y ochos acompañados por sweaters boyfriend, manguitos de pelo de zorro y pequeños bolsos pochette ultrafemeninos.
Colección Otoño Invierno 2010 2011
Otoño Invierno 2010 2011