18 Feb Un vestido para una reina
Para el estreno de la temporada del Teatro Real de Madrid que tuvo lugar en septiembre de 2019, recibimos el misterioso encargo por parte de Lola Li de confeccionar un diseño de esta marca, “especial, a medida”.
Descubrimos la identidad de la cliente, el mismo día que la Reina lo vistió, en aquella ocasión.
Reproducimos a continuación el artículo completo que el diario digital, tuotrodiario.com publicó con esta noticia el 19 de diciembre de 2019.
Lola Piña, la emprendedora que confeccionó un vestido rompedor para la reina Letizia
Fundadora del taller de costura Al Dedal, trabaja con algunas de las firmas y marcas de moda de más renombre.
Con el sueño de recuperar el oficio artesano de modista, Lola Piña creó Al Dedal, un taller de costura que trabaja con algunas de las firmas y marcas de moda de más renombre. Lo puso en marcha gracias a Red Netmentora -una asociación de empresarios que sin ánimo de lucro ayuda a emprendedores a crear empleo y riqueza- y Al Dedal ya es un taller de referencia. De él ha salido una creación única: el vestido de diseño ‘oversize’ que llevó la reina Letizia en el estreno de la temporada del Teatro Real el pasado mes de septiembre.
Aunque el de Lola Piña es un “proyecto de corazón” y ella es una gran profesional de la costura con una larga trayectoria, reconoce, en declaraciones a ‘Tu Otro Diario’, que es “empresaria por obligación” y que, “si no existiera Red Netmentora, posiblemente Al Dedal tampoco existiría hoy”. Esta asociación puso a su disposición “un despliegue operativo, profesional y personal” clave para el desarrollo del negocio.
La empresa es el colofón a toda una vida dedicada a la costura, un oficio que aprendió de mano reconocidos modistos y diseñadores, como el emblemático Manuel Piña y Sybilla. “Tuve la suerte de trabajar para Manuel, de que me formara, de que me enseñara”, y de otros profesionales del sector a los que se uniría después, pero si hay alguien que le haya servido de inspiración es su madre, Isidra Manzano.
“Mi madre es modista, ya jubilada. Yo, desde bien pequeña, recuerdo ver en mi casa los vestidos de novia colgados en las perchas, en las puertas de las habitaciones…” Tras varios años, empezó a trabajar con Manuel Piña como jefa de taller. “Comencé a verla feliz, apasionada, emocionada…”, por lo que pensó que debía intentarlo y dedicarse a eso ella también. “Si esto emociona tanto, a lo mejor a mí me pasa lo mismo… Y me pasó”.
EL VESTIDO DE DOÑA LETIZIA
Confiesa que fue toda una sorpresa ver que doña Letizia llevaba una prenda confeccionada en su taller. Lola Li, la marca que lo diseñó, hizo un encargo “especial, a medida” a Al Dedal, pero “no sabíamos para quién era”. Lo descubrieron el mismo día que la Reina lo vistió, después de que les informara Amparo Utrilla, la directora artística de Lola Li. “Sentí mucha emoción”, dice.
“Lo que más me emocionó fue que, en todos los artículos que leí, aparecía la palabra ‘impecable'”, asegura. De hecho, así es como se describió en ¡HOLA! al “impecable vestido blanco” con el que doña Letizia había “vuelto a brillar”.
Ese tipo de críticas llenaron a Piña y a su equipo de orgullo porque supuso “poner el marchamo de calidad” a su trabajo y la confirmación del objetivo de Al Dedal, que es precisamente ese: “hacer prendas impecables”.
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